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Gustavo Rowek: Armé mi estilo basado en mis limitaciones

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¿Cuál fue tu primera batería? Mi viejo, un tipo muy ligado al arte, director de sonido e iluminación del teatro Cervantes, me compró una Rex. Mirá como son las vueltas de la vida que se la compré a Fito Messina, con quien mantengo una gran relación al día de hoy. También gracias a mi viejo tuve mi primer acercamiento a la música, me hizo escuchar discos de grandes bandas como Fleetwood Mac, Cream, etc.

¿Reconocés esas bandas como tus primeras influencias? Empecé escuchando eso porque estaba en mi casa. Con el grupo de amigos de la secundaria con quien también formé mi oído musical: Jeff Beck, Eric Clapton, Rolling Stones y los Beatles. Más tarde Rush me rompió la cabeza. También El Reloj y Pappo. Pero más que nada rock inglés, Deep Purple, Led Zeppelin y Black Sabbath, que fue lo que finalmente me llevó a querer tocar.

¿Cómo fue tu ingreso a V8? Una vez los vi en un festival dónde Ricardo [Iorio] anunciaba que era el último show porque el baterista se iba de viaje. En ese momento Osvaldo Civile estaba entre el público y cuando termina el show se acercó a Ricardo para proponerle que no separe el grupo, que él se ofrecía como violero y yo había quedado flasheado por la banda. Nos empezamos a juntar en una sala por Chacarita a zapar sobre temas de Black Sabbath. Luego apareció Beto [Zamarbide] que era plomo de Dulces 16. Establecida esa formación, Pappo, que tenía relación con Beto, nos consigue una nota en la revista Pelo porque le había gustado mucho la banda. Todo esto previo a la guerra de Malvinas, se vivían momentos muy tensos en el país y nosotros tocando una música pesada y cargada de bronca contra los hippies, que con su postura no habían logrado cambiar nada.

¿Qué recuerdos tenés del BA Rock del año 82? Tocamos en ese festival sin haber sacado un disco. Pappo, que fue muy importante en la carrera de la banda, presionó para que toquemos, sino Riff no lo haría. Nos presentamos delante de un público que nos escupió y nos tiró de todo. Ahí se da una famosa frase de Ricardo: “y los hippies, que se mueran”. En ese momento todo el público se dio vuelta y dejó de mirar el escenario, ahí me di cuenta que lo nuestro no iba a pasar desapercibido. Al año siguiente salió Luchando por el metal [1983] por Umbral, un sello de cuarteto. El productor fue Quebracho, conocido plomo de Charly.

¿Cómo eran las grabaciones de los de discos de V8? Complicadas porque nosotros estábamos en una etapa de “mala conducta” en progreso. Grabábamos en Panda de 12 de la noche a 8 de la mañana, por lo tanto cualquier loco que andaba suelto por la ciudad era bien recibido por nosotros. Mario Breuer trató de dar una cuota de sensatez pero la situación era complicada. Igualmente pudimos sacar el primer disco y luego, a pesar de que la relación entre nosotros estaba un tanto resquebrajada, editamos Otro paso más en la batalla [1984] que lo grabamos en 300 horas.

¿Tuviste algún tipo de formación musical? Durante muchos años fui autodidacta, era fanático de Cozy Powell, Rainbow, Bonham y Bill Ward, así fui armando mi estilo y también basado en mis limitaciones. También se produce la explosión de lo que se dio en llamar la “Nueva Ola del Heavy Metal Británico” con la aparición de bandas como Judas Priest, Saxon y Iron Maiden. Muchos me preguntaban si en esa época yo usaba doble bombo, y yo les decía que no, afinaba la chancha más grave y lo usaba como otro bombo marcando con el hi-hat el tiempo del tema.

En el primer disco de Sepultura (Morbid Visions 1986), nombran a V8 entre los agradecimientos. Si, fue muy loco. En un festival Monsters of Rock que fui a tocar con Rata Blanca, Igor Cavalera por entonces baterista de Sepultura, se acercó a preguntarme si yo era el baterista de V8 porque quería sacarse una foto. Gil Solá me contó que, estando en Estados Unidos, conoció a los Dead Kennedys en San Francisco y que en los ensayos escuchaban a V8.

¿Cómo conseguías ese sonido que caracterizó a tu batería? Fue una suerte de descubrimiento para ese momento. En los finales de V8 y durante toda mi carrera en Rata Blanca usé la doble tensión en la batería, es decir, cascos con parche arriba y parche abajo. Eso produce que la masa de aire en ese espacio genere el sustain indicado, el que a mi me gustaba y el que volvió loco a muchos sonidistas de esa época, ya que en los ‘80, cuando se produjo el auge de las máquinas, pocos sabían microfonear o grabar una batería acústica y poder sacarle un buen sonido.

En la actualidad te desempeñás como drum doctor. ¿Cuáles son las condiciones para trabajar en ese rubro? Además de estar equipado con todo lo que le proveés al músico, tenés que conocer de música y de diferentes estilos. No todos los bateristas buscan lo mismo ni tocan de la misma manera. Depende del golpe del batero es el tipo de parche que se va a usar en función del sonido que se busca y del estilo que están tocando. No es lo mismo el sonido de batería de Los Natas que el sonido de los No Te Va a Gustar. Mucho tiene que ver el “room”, el lugar donde fue grabado. El ambiente donde se grabe la batería, va a ser el ambiente del disco, ahí es donde está el sonido. El bombo y el tambor definen, pero el redoblante es el que finalmente define el color de la canción que se va a grabar. Depende de la canción el tipo de tacho que se va a utilizar, una buena canción con una mala elección del tambor, puede terminar siendo una mala canción.

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¿Y en el caso de grabaciones de heavy metal? Para temas pesados donde hace falta un golpe duro uso un Tama de maple de 8 pulgadas. Para tocar una canción rápida uso tambor de brass, que es una aleación, de 5 ½ pulgadas que tiene mucho armónico. Para temas más rockeros utilizó un tambor de 6 ½ pulgadas. Cuando produje las baterías de bandas como Kapanga o Los Natas cambiábamos el set completo. Dependiendo del tema a grabar usábamos un set 14’ y 18’ en toms, o toms de 12’ o 13’. Con respecto a los parches uso Ambassador, ya que no me gustan los parches doble hoja y los Ambassador son duros pero de una sola hoja, y en el bombo uso Evans o un Power Stroke de Remo que tiene una doble barra reductora de armónicos.

Durante tu tiempo en Rata Blanca usabas doble bombo que luego reemplazaste por un solo bombo y un doble pedal. Usando un solo pedal, ¿se puede conseguir que suene como uno doble? Con Nativo comencé a implementar un solo pedal, si quiero puedo usar una sola masa y hacer el trabajo de dos. Esto lo aprendí con el maestro Chiche Heger. Antes, para tocar el pedal del bombo, la fuerza salía de la rodilla, entonces la masa siempre quedaba apoyada sobre el parche lo cual hacía que el parche deje de moverse y mataban el sustain. El buen uso de esta técnica es fundamental para el uso del doble pedal porque si se mantiene apoyada la masa, anula el golpe de la otra y deja de sonar. Estando el pie bien apoyado sobre esas “almohadillas” que tenemos en la planta del pie bajo los dedos y haciendo que caiga el peso de la pierna, cargás de energía el pedal y apenas liberás el talón la masa vuelve hacia atrás, entonces dejás de hacer fuerza y volvés a pisar utilizando la física a tu favor para que el pedal, en el rebote, vuelva a golpear.

¿Cómo estás equipado? ¿Qué set de batería usás? Tengo una Arstar II de Custom de Maple, un modelo top de los ‘90, hecha para endorser o sea, que no es en serie. Toms de 10’, 12’, 13’, 14’, 16’ y 18’. Además otras baterías que uso para diferentes ocasiones, tengo una Tama de bubinga, y una Ludwig. Tambores Tama de brass de 5 ½’, Tama de Arstar de 8 pulgadas, un Ludwig martillado a mano, un Tama de bubinga de 5 ½ ‘. De platillos tengo una pareja Sabian AAX metal, AAX metal de 18’, medium crash AA de 18´, un Splash AA de 10’, un China de 20’ AAX, mini China de 8’ que se me acaba de romper y se que no se hace más. Un Cymbal disc, que es como una campana que tampoco se hace más y un medium thin Crash de 20’, me gustan los ambientes muy platosos, de platillos grandes, todos platos Sabian. Tengo un pedal Camco de Tama con sistema de resortes cambiados. Dos bombos de 22’ x 16’. No uso bombo de 24’ porque me resulta demasiado difuso el golpe. Yo en V8 usaba un bombo de 26’. En el BA Rock de V8 usé una Colombo, que también le compré a Fito Messina, con un bombo de 26’. Y uso palillos Quicktension 4A, un modelo diseñado especialmente para mi.

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