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Jorge Rossi: Como decía Vitico, prefiero el cable

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¿Empezaste tocando el bajo? No, comencé con la batería. Tenía una Rex. Después pasé por la guitarra, pero no funcionó en ese momento. Al tiempo, empecé a tocar el bajo. El primero que tuve fue un Starfighter nacional. Después de haber comenzado a tocar el bajo con una banda de punk, pasé a tocar con Los Gardelitos durante 7 años, hasta que armamos Intoxicados. Yo creo que el yeite es saber escuchar a tus compañeros, empezando por la batería, al cantante. La clave está en la combinación de sonidos, porque cuando yo marco un silencio otro está pasando al frente.

Ahora vos estás produciendo, ¿cuál debe ser la virtud del productor? Es como tocar un poco con todos. Creo que lo mejor es sacar o potenciar lo mejor de cada uno de los músicos. Es saber darle el lugar a todos los instrumentos, escuchando de qué hablan las letras, para poder generar los climas que pide la canción. Que un tema suba o baje, que no sea lineal, y que a su vez no pierda la fuerza.

¿Cómo estás equipado para sonar en vivo? Uso un Hartke System, dos cajas, una de 4x10” y otra de 15” y un cabezal de 250W. Uso un Fender Jazz Bass y un Precision, además de que a veces uso pedales. Usé un line-in alguna vez, pero ahora volví a los “cochecitos” analógicos, un chorus y un synthe. ¿Qué criterio manejás para pisar uno u otro pedal? De acuerdo a lo que pida la canción. Hay un tema de Intoxicados (“El reggae de Mirtha”) en que uso el synthe porque el tema va bien con ese sonido de bajo para la base. El chorus lo uso mucho en canciones, porque da como ese efecto envolvente que va y viene.

¿En vivo preferís inalámbrico o cable? En vivo, como me decía mi amigo Vitico, prefiero cable. Por las frecuencias graves que maneja el bajo con el inalámbrico, a veces es posible que se pierdan un poco. A veces me da miedo, cuando hay muchos mics de aire. Un buen cable creo que es lo mejor y lo más seguro. Para el monitoreo, si uso inalámbrico, tengo un Shure in-ear. Lo uso mucho porque hago coros y es bueno poder escucharse y no tener que andar gritando. Igualmente creo que está bueno poder pasar por todas las experiencias. Salir a tocar sin monitoreo te hace aprender también. El ensayo es fundamental, te prepara para salir a tocar con buen o mal sonido, con o sin monitoreo.

¿Qué diferencias hay entre tocar en estadios y en lugares más pequeños? Cada lugar tiene sus cosas a favor y en contra. Nos pasó tocar en grandes festivales y encontrarnos con un show muy frío. Me parece que es bueno armar el show de acuerdo al lugar en que tocás. Poder interactuar con la gente y no estar dependiendo de un gran sonido ni de una pantalla también está muy bueno. En lugares tan masivos la puesta es más visual, más grande. Se hace visualmente entretenido ver una pantalla y no ver a cuatro hormiguitas a lo lejos. Recuerdo el concierto de Roger Waters en River y, además de su música, el show me pareció de lo mejor que vi.

Fuera de Intoxicados ahora estás trabajando en tu propio proyecto. ¿Qué formato va a tener la banda? Es una banda abocada a la canción. Está conformada por María Eva Albistur en bajo (que alguna vez tocó con Sabina y tiene editados discos en España), el Negro García López en guitarra, Fernando Samalea en batería y Adrián Burbujas, el tecladista de Intoxicados. Ya tenemos bases grabadas en Circo Beat. Yo estoy tocando guitarra y cantando. Está la idea de grabar unos vientos y unas cuerdas de verdad y para fin de año tenerlo terminado.

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